El campo de la salud define la rehabilitación física como aquella área de la medicina que involucra un conjunto de métodos profesionales destinados a la mejora de ciertas patologías presentes en el individuo. Estas pueden ser adquiridas de forma congénita o diagnosticadas en determinado momento de la vida.
Se habla de rehabilitación infantil cuando en la primera etapa del crecimiento se detecta algún trastorno o lesión que impida la correcta ejecución de las funciones motrices o neurológicas del niño. Para su corrección, se deben emplear técnicas especializadas basadas en terapias.
La rehabilitación suele estar asociada a la fisioterapia, terapia ocupacional y a la medicina física. Estas especialidades médicas también buscan prevenir disfunciones secundarias que puedan aparecer en el paciente a lo largo del tiempo.
Esta área de la medicina también se aplica en pacientes con discapacidad. Igualmente, también sirve para casos de trastornos y circunstancias especiales como lo son el embarazo, el estrés o el envejecimiento.
En otras palabras, la rehabilitación infantil engloba una serie de tratamientos interdisciplinarios donde el niño o adolescente con patología es abordado con tratamientos acordes a sus necesidades. Por tal razón, esta área se plantea aminorar la limitación en la actividad del niño. Pretende que alcance un nivel físico, mental y social óptimo alcanzando así una mejor calidad de vida.
La rehabilitación infantil es un proceso encaminado a permitir que el pequeño que presente limitaciones de algún tipo pueda curarlas o mejorarlas. Se trabaja mediante técnicas especializadas que pueden involucrar terapias y ejercicios de duración limitada.
Cuando un niño presenta lesiones físicas, la fisioterapia se usa como método curativo como parte de su rehabilitación. Esta consiste en la aplicación de algunos agentes tales como la luz, el calor, el frío y/o ejercicios. Según el diagnóstico, la lesión deberá ser atendida por los especialistas de una clínica de fisioterapia. Ellos son los indicados para tratar la reestructuración del daño en patologías de orden físico.
Concretamente, este proceso puede aportar en el paciente bienestar, dependiendo del tipo de afección que presente. Entre algunos logros podemos encontrar:
Ante la presencia de pacientes con problemas neurológicos, pueden ser sometidos a rehabilitación los casos de: Amiotrofia, debilidad muscular, espasticidad, diplejía, ataxia, temblores, deformidades, malas posturas, contracturas, hipertonía, entre otros.
Para rehabilitar a un paciente de forma física, se utilizan métodos curativos que impacten directa o indirectamente en la lesión.
Estos consisten en tratar la parte afectada con instrumentos y técnicas apropiadas que buscan aliviar dolor o inflamación en el niño o adolescente. Generalmente, son supervisadas por un equipo de profesionales o terapeutas. En ciertas ocasiones, el especialista puede indicar tratamientos sencillos que se pueden ejecutar desde casa.
Esta especialidad estudia al paciente de forma integral. Evalua las deficiencias que existen a nivel osteoarticular, limitaciones o secuelas que limiten la autonomía del individuo. Tiene el deber de establecer un plan de tratamiento acorde y de evaluar posibles secuelas que puedan aparecer luego del proceso de rehabilitación.
También tiene la responsabilidad de capacitar a los padres o representantes. los pone al tanto de los cuidados necesarios que requerirá el paciente.
El proceso de rehabilitación tiene mejor alcance cuando se realiza de forma temprana u oportuna. La incidencia es positiva en pacientes sometidos a ella. Se han obtenido excelentes resultados a medio plazo, aunque en algunos casos, es cuestión de años.
Clínicamente, un niño o adolescente también puede ser sometido a rehabilitación por presentar distintos tipos de alteraciones tales como: Alteraciones ortopédicas, neurológicas, reumáticas, u otras.
Según sea la afección, se establecen diferentes objetivos. Sin embargo, existen unos generales de importancia. Entre ellos podemos destacar los siguientes:
Desde un punto de vista clínico, el objetivo principal de la rehabilitación infantil consiste en mejorar cualquier afección que pueda limitar al niño durante su desarrollo físico.
De igual forma, entre los objetivos más específicos que se pueden destacar en la rehabilitación física se encuentran algunos de los siguientes:
La prevención resulta ser uno de los objetivos presentes en la fisioterapia. Es muy eficiente para el tratamiento de tendinitis, ligamentos de rodilla, menisco, esguinces de tobillo, rupturas, entre otros.
Existen muchas modalidades que se emplean en la rehabilitación física. Estas varían de acuerdo a la patología. En su mayoría son indoloras. No obstante, algunas pueden producir molestias momentáneas, pero a fin de cuentas contribuyen en la recuperación del daño.
Entre los tipos de tratamientos más comunes se pueden mencionar:
Los niños sometidos a rehabilitación física ayudan al correcto desarrollo del organismo y sus funcionalidades. Un niño no debe necesariamente tener alguna alteración congénita de origen muscular para ser tratado. El pequeño, al estar en etapa de crecimiento, puede prevenir cualquier trastorno mediante la fisioterapia.
Entre los beneficios más sobresalientes están: Estimulación sensorial, el aumento de las defensas del cuerpo, la ampliación de la capacidad respiratoria, mejoras en el desarrollo motor, estimulación de los vínculos afectivos; entre muchas otras.
Estamos especializados en corregir o prevenir cualquiera de las patologías antes expuestas. La evaluación temprana del niño en un centro de fisioterapia como el nuestro puede beneficiarle para el resto de su vida. Aconsejamos también acudir a nuestro centro de osteopatía para un diagnóstico más completo.