La rehabilitación ortopédica es el nombre que le ha dado la ciencia una serie de técnicas fisioterapéuticas que se les aplica a personas con afecciones en su sistema músculo-esquelético.
Desde niños hasta adultos, desde una persona caminando por la calle hasta un deportista, cualquiera es propenso a sufrir de una lesión. Incluso por el simple hecho de caminar de forma incorrecta y tal vez forzar inadecuadamente una articulación, se puede sufrir una lesión.
Cuando se presentan lesiones en huesos, músculos, ligamentos, articulaciones o tendones, es altamente probable que la condición física de la persona de una manera u otra se vea afectada. Gracias a una buena terapia de rehabilitación, es posible que la persona pueda restablecer las habilidades físicas perdidas. Por supuesto, podría recuperar la natural movilidad si fuera el caso.
Las principales funciones de la rehabilitación ortopédica son en primer lugar enfocarse en mejorar la función del sistema músculo esquelético del paciente. En segundo lugar, acortar el tiempo de recuperación y mejorar la calidad de vida de quienes hayan sufrido una lesión.
Conocer de qué se trata este procedimiento y qué se hace en el proceso de mejora de la lesión, puede ayudar a reconocer el padecimiento y tomar la decisión en el tiempo adecuado.
Lo más importante es entender que la idea es buscar una solución a una limitación músculo esquelética. En otras palabras, en una clínica de fisioterapia, el propósito es solucionar complicaciones relacionadas con las articulaciones, los músculos, los huesos, ligamentos, cartílagos y tendones.
El trabajo que se realiza en una terapia de rehabilitación ortopédica tiene como finalidad disminuir el dolor que una persona esté sufriendo a causa de una lesión, de una cirugía o de una enfermedad.
De igual manera, busca que el paciente vuelva a tener una movilidad funcional y adecuada. Debe recuperar funciones osteomusculares perdidas e incluso aprender a superar las limitaciones de movimiento que pueda estar teniendo.
Cada rehabilitación es diferente, va de acuerdo a cada paciente y a su condición física y de salud. En estas, se procura que el tratamiento sea progresivo y de acuerdo a la condición del paciente. Es decir, va ir aumentando de acuerdo a sus capacidades, encaminando el proceso a la mejora y recuperación de la lesión.
En nuestro centro de rehabilitación el especialista primero realizará una evaluación para determinar un tratamiento adecuado.
La rehabilitación ortopédica consiste en la realización de una evaluación completa del sistema musculoesquelético del paciente y al mismo tiempo de sus capacidades funcionales. El propósito de la evaluación es poder determinar la disfunción que presenta el paciente y cuáles son sus habilidades o capacidades hasta ese momento.
En un primer paso, el terapeuta determina el rango de capacidad de movimientos que puede alcanzar el paciente. De igual manera, se evalúa el nivel de dolor que causa la lesión o el movimiento del área afectada.
El siguiente paso que se realiza es el desarrollo de un plan de tratamiento por parte del terapeuta. Este se basará en las capacidades del paciente y en los objetivos que quieren alcanzar.
Las sesiones pueden durar entre 30 y 60 minutos, dependiendo de lo que se haya determinado en el plan de tratamiento. En estas sesiones se incluyen estiramientos, terapia manual y ejercicios. Asimismo, durante el tratamiento el terapeuta va educando al paciente para que sepa cómo va a movilizarse en su día a día, y eventualmente ejercitar en su casa, para no perder el trabajo realizado.
Las sesiones de rehabilitación suelen ser individuales. Esto se debe a que hay más tiempo y dedicación al paciente para enseñarle todo lo relacionado con su lesión.
Sin duda alguna, el objetivo primordial que se busca alcanzar a través de la rehabilitación es acelerar el proceso de recuperación de la lesión que esté padeciendo una persona. Recuperar la movilidad, aliviar el dolor e incluso mejorar la calidad de vida es lo que se busca como objetivo.
Siendo más específico, se puede determinar que los objetivos de la rehabilitación son:
El trabajo no solo es físico, también está involucrada la fase psicológica. Una persona que padezca una lesión suele estar en una situación emocional nada fácil. Por eso, la terapia, a parte de buscar mejorar su calidad de vida física, también busca hacerlo a nivel emocional.
En la rehabilitación ortopédica fundamentalmente existen dos herramientas primordiales. Cada una de estas técnicas de rehabilitación conlleva métodos que se usan de diferente manera y de acuerdo a la condición de cada paciente.
Una persona que presente una lesión o haya tenido una cirugía y necesite rehabilitación, tendrá como beneficio primordial la ayuda de un profesional. Esta figura, a través de un tratamiento adecuado a la situación, le dará la oportunidad de calmar el dolor o los síntomas que pueda presentar.
La movilidad, el alivio del dolor y la mejora de la funcionalidad son los principales beneficios que puede tener una persona que realice una rehabilitación. De hecho, en algunos casos una rehabilitación ortopédica puede ayudar a que el paciente no tenga que pasar por un quirófano, siempre que el tratamiento dé el resultado esperado.
En muchos casos, puede ayudar a que el paciente logre dejar los fármacos que estuviera tomando para mitigar el dolor. Estos, en dosis excesivas o por uso continuo, pueden ser perjudiciales a mediano y largo plazo.
En definitiva, una adecuada terapia de rehabilitación ofrece más que solo beneficios físicos a los pacientes.