Aunque la diatermia puede parecer algo nuevo, la realidad es que es aplicada desde principios del siglo XX. Sin embargo, en la actualidad ha ganado popularidad y es bastante empleado por profesionales del deporte gracias a los buenos resultados que ofrece. Igualmente, tú puedes optar por aplicarte este tratamiento en esta clínica de fisioterapia.
Aquí te explicamos todo lo relacionado con la diatermia. Te explicamos en qué consiste y cuáles son sus beneficios. Además, podrás conocer los riesgos o contraindicaciones que tiene su uso.
Se trata de una terapia manual que cada vez se utiliza más en fisioterapia, convirtiéndose en una de las más buscadas. También es conocida como tecarterapia y con este método se aplica un tratamiento médico no invasivo. La técnica es especialmente provechosa en el ámbito estético y fisioterapeuta. Incluso, es beneficiosa para tratar varias patologías.
La tecnología que emplea la diatermia es la radiofrecuencia. Utiliza corriente eléctrica de alta intensidad o frecuencia, la cual se aplica en el interior de los tejidos. Para ello, se utiliza un aplicador que integra un electrodo encargado de transmitir las ondas de radiofrecuencia. Por eso, también se califica como electroterapia.
El equipo de diatermia permite regular la intensidad de las ondas. Esta se puede ajustar hasta una frecuencia máxima de 448 KHz. Gracias a ello, es posible adaptar la técnica al tipo de tejido que se va a tratar y las sensaciones del usuario durante el tratamiento.
Es importante tener en cuenta que esta técnica ofrece un mayor efecto en comparación con otros tipos de termoterapia. De hecho, es más efectiva al tratar zonas lesionadas, pues el calor tiene más profundidad llegando incluso al tejido óseo.
Los efectos positivos que ofrece la aplicación de esta terapia ha hecho que sea muy utilizada en diferentes campos. Principalmente, se emplea en tratamientos de fisioterapia para combatir las lesiones ya que reduce bastante el tiempo de recuperación. Así mismo, permite tonificar los músculos y disminuir inflamaciones.
Igualmente, es una buena herramienta para el ámbito estético. Los efectos de la electroterapia sirven para eliminar cicatrices, tanto de heridas, como de enfermedades y el acné. Igualmente, es muy útil para combatir y evitar la celulitis causada por la acumulación de grasa. Además, estimula la formación de colágeno, lo cual ayuda a reducir las arrugas.
Otros de los campos donde es útil la diatermia es la ortopedia y traumatología. Con ello, se fortalece la estructura ósea y la resistencia de los huesos. Así mismo, se ha comprobado que ayuda a cicatrizar y cerrar heridas, especialmente las causadas por una operación. Además, contribuye a la recuperación tras sufrir una contusión.
Quienes sufren de varices y arañas vasculares pueden optar por este tratamiento, pues sirve para fortalecer las arterias y venas. De hecho, reduce la presión arterial al reactivar la circulación. No podemos dejar de lado que también es excelente para aliviar dolores causados por patologías como fibromialgia y artritis.
El funcionamiento de esta técnica de electroterapia ofrece grandes beneficios. Por eso, se ha convertido en un método muy utilizado en distintos campos. Esto se debe a que el campo electromagnético alterno creado logra atraer y repeler las cargas eléctricas que hay en los sustratos biológicos.
La diatermia eleva la temperatura de los tejidos, pudiendo llegar hasta los 45⁰, aunque esto depende de la intensidad establecida. Además, el efecto de calor puede penetrar de 4 a 6 cm de profundidad. Gracias a ello, se logra elevar la temperatura del tejido local, lo cual permite obtener resultados:
Dependiendo de la temperatura con la cual se aplique la diatermia tambien se pueden obtener diferentes efectos en los tejidos. A este respecto, se producen efectos de:
Gracias a estos maravillosos efectos y la versatilidad que tiene el tratamiento de electroterapia, se dispone de grandes beneficios. Entre los más destacados se encuentran:
Es posible aplicar este tratamiento de dos formas diferentes, ya que existen dos tipos de electrodos. Cada uno tiene efectos distintos, por lo que se utiliza dependiendo de la zona o el tejido que se vaya a tratar. No obstante, en muchos tratamientos se utilizan los dos tipos de electrodos para combinar técnicas y resultados.
Como ya hemos dicho, es normal combinar las técnicas capacitivas y resistivas. A este respecto, normalmente se inicia con la capacitiva. Contribuye a preparar la piel para una acción más profunda de la técnica resistiva. Para ello, el osteópata conoce bien las formas adecuadas de aplicar las técnicas de acuerdo a la patología o zona a tratar.
Sí, existen algunas contraindicaciones. En ciertas situaciones o condiciones, no es posible aplicar este tratamiento. De modo que lo mejor es que estés al tanto de estas contraindicaciones si piensas aprovechar sus beneficios.
